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BARCELONA.- El FC Barcelona considera a Frenkie de Jong, el prometedor mediocentro del Ajax de 21 años, personaje capital en sus planes a futuro y, sin perder la cabeza por entrar en una subasta que en Holanda empieza a apuntarse con la aparición de otros clubes interesados, pretende atar su incorporación de cara a próxima temporada lo antes posible.

Donde no hay, para nada, tal convencimiento es en el caso de Paul Pogba, de quien el club azulgrana se mantiene en silencio por más que este miércoles el diario The Sun publicase que el mediocampista francés estaría cerca de concretar su traspaso al Camp Nou en el próximo mercado de invierno.

Con el fiasco de Antoine Griezmann todavía en la retina, el Barça no quiere que se repita el caso con De Jong y al tanto de todas las informaciones que han aparecido desde que comenzó la temporada, con el último anunciado interés del Real Madrid en el plano, se ha apresurado a mover sus piezas discretamente para asegurarse un fichaje que, sostiene, tiene bien encaminado.

El jugador no ha disimulado sus preferencias en las contadas ocasiones que se ha referido a su futuro deportivo y a pesar de que desde el Ajax se ha enfriado su relación con el club azulgrana, en el Camp Nou se mantiene que su fichaje está bien encaminado, sin caer en el desánimo o preocupación (al menos públicamente) por supuestas ofertas de Real Madrid, Manchester City, Juventus o PSG que pudieran conducir la operación a cifras prohibitivas.

En este sentido, y aunque el diario holandés De Telegraaf apuntó el martes que el Ajax podría ingresar hasta 95 millones de dólares por el traspaso de De Jong, el Barça estima que el compromiso del propio futbolista le mantiene en una posición de privilegio y que el sueño, proclamado por él mismo, de jugar al lado de Messi y en el club en el que triunfó a todos los niveles Johan Cruyff, el holandés más universal de la historia del futbol, debería decantar la balanza a su favor.

Compromiso

El Barcelona mantiene una norma indiscutible que ha devuelto al plano, de hecho, después del caso Griezmann: para jugar en el Barça, primero de todo, tiene que existir el deseo máximo de hacerlo. Si es por dinero, se entiende, el fichaje de De Jong sería una batalla abocada al fracaso porque en París o Manchester (incluso en Madrid) el jugador obtendría un mayor beneficio económico. A partir de ahí, es su compromiso personal el que debe decidir.

Hay una sentencia, histórica, de Johan Cruyff que acude al primer plano de manera indiscutible. “Si quiere disfrutar y ganar títulos y reconocimiento fichará por el Barça; si solo quiere ganar dinero se irá al Inter”, explicó el recordado entrenador holandés a principios de 1993, cuando el club azulgrana trabajaba el fichaje de un joven Dennis Bergkamp… que acabó en Milán.

La catástrofe de aquella decisión se confirmó en el verano e 1995, cuando tras dos temporadas muy discretas en el club italiano Bergkamp se marchó al Arsenal, con el que se convertiría en leyenda y desde donde reconoció en más de una ocasión su error de no haber atendido la llamada de su descubridor para jugar en el Barça.

Esta es la principal carta que mantiene la directiva de Josep Maria Bartomeu y, también, la que pretende trasladar al agente de De Jong, Ali Dursun, para que haga ver al Ajax sus intenciones. Y, para evitar subastas tan peligrosas como innecesarias, el Barça quiere solventar el caso más pronto que tarde, antes de verse en un escenario como el de Griezmann.

Sin noticia de Pogba

En paralelo al interés, concreto y conocido, por el fichaje de Frenkie de Jong, el nombre de Paul Pogba se mantiene en el escenario de manera inequívoca. Sus publicitados desencuentros con Mourinho en el Manchester United y los movimientos continuados de su agente Mino Raiola han colocado al jugador francés en la órbita del Barça… Desde donde se echan balones fuera.

“Son rumores; nada más”, apuntó una fuente muy cercana al club azulgrana consultada por ESPN, dando por hecho que en el caso de Pogba pesa más el deseo de Raiola por colocarle en el escenario que un movimiento, que no ha existido, del Barcelona por hacerse con sus servicios.

El mediocampista galo no es un desconocido en el Camp Nou, donde existen muchos y muy buenos informes de él y a quien se mantiene un seguimiento pormenorizado para saber cuál sería su encaje en el sistema azulgrana… Pero financieramente se sospecha que su fichaje es casi una locura.

Si el Manchester United pagó en su día 120 millones de dólares por él y en Old Trafford se especula que disfruta de un salario anual superior a los 18 millones, la operación se dispararía en todos los sentidos y el Barça, que para nada le cerraría la puerta a un jugador de sus características, intuye que no podría entrar en esa guerra.

Más aún teniendo en cuenta que De Jong es el objetivo prioritario, que ya existe una larga nómina de jugadores en el centro del campo y que, de cara a un futuro no demasiado lejano, el área deportiva deberá comenzar a plantearse la sucesión de Luis Suárez. Otro asunto, éste, que traerá cola en el Camp Nou.

ESPN Digital