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MOSCÚ.- EFE- El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, apoyó hoy la ofensiva siria en la provincia de Idlib y advirtió de que cualquier ataque terrorista contra la zona de distensión tendrá una respuesta contundente.

“Dimos a entender con toda claridad que si ellos realizan ataques en esta zona contra el Ejército sirio, contra la población civil, contra nuestra base aérea en Hmeimim, estos ataques serán reprimidos con firmeza”, aseveró Lavrov durante una rueda de prensa.

Las fuerzas sirias continúan hoy su ofensiva contra el bastión rebelde de Jan Shijún, en el sur de la provincia de Idlib, y controlan ya el 60 % de sus barrios, mientras buena parte de las facciones armadas han comenzado a retirarse.

Lavrov subrayó que el incremento de las tensiones en Idlib se debe a que los extremistas “no cejan en su empeño de atacar desde allí objetivos en otras partes de Siria”.

“Los militares turcos crearon varios puestos de observación. Confiábamos que esto contendría las provocaciones, pero estas continuaron a pesar de los observadores militares turcos”, señaló.

El ministro indicó que los militares rusos están en permanente contacto con la parte turca.

“Naturalmente, nosotros no solo observamos esta situación, nuestros militares están sobre el terreno”, alegó.

La tensión en Idlib aumentó la víspera tras un ataque aéreo contra un convoy turco en el sur de la provincia, último bastión rebelde en el país, mientras las tropas sirias avanzaban para capturar la localidad estratégica de Jan Shijún, dominada por insurgentes.

Damasco denunció que el convoy turco se dirigía a Jan Shijún “para rescatar a los terroristas derrotados del Frente al Nusra”, como se denominaba hasta julio de 2017 la exfilial siria de Al Qaeda.

En esta acción, según Ankara, tres civiles perecieron y otros doce resultaron heridos, sin bajas en las filas de los turcos, estacionados en puestos de observación en el país árabe en base a un acuerdo con Rusia pactado el pasado otoño en el balneario ruso de Sochi.

El acuerdo de Sochi, sellado por Turquía y Rusia en septiembre de 2018 y que nunca fue respetado del todo, establecía la creación de una zona desmilitarizada que abarcaba Idlib, el norte de Hama y la mediterránea Latakia, así como el oeste de Alepo, zona que debería estar bajo supervisión conjunta de turcos y rusos. EFE