El profesor Josué Sznitman y su equipo del Technion han desarrollado una tecnología innovadora que podría mejorar notablemente la eficacia de los medicamentos existentes para tratar el síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA).
La tecnología podría ayudar a salvar las vidas de pacientes graves con COVID-19 que padecen SDRA. Debido a la crisis mundial, su desarrollo se está realizando rápidamente.
Un equipo de investigación dirigido por el profesor Josué Sznitman de la Facultad de Ingeniería Biomédica del Technion está estudiando la efectividad de un innovador tratamiento pulmonar para SDRA, que es considerado como la principal causa de mortalidad en pacientes con COVID-19.
Sznitman y su equipo están en una carrera para lanzar ensayos clínicos en unos pocos meses y evaluar la nueva tecnología para el tratamiento de pacientes graves con Coronavirus que padecen SDRA. Hasta la fecha, no existe una terapia para tratar a los pacientes con SDRA. Estos pacientes se someten a ventilación asistida y oxigenación, a menudo bajo intubación, en unidades de cuidados intensivos (UCI).
Una de las características del SDRA es el daño al surfactante pulmonar (el líquido que recubre la superficie de los alvéolos en los pulmones). El surfactante tiene muchos roles, pero quizás el más importante es que reduce las fuerzas requeridas para respirar. Mientras que la investigación está en curso en la comprensión del virus SARS-COV-2, se demostró recientemente que el virus mata las células epiteliales que secretan surfactante dentro de los alvéolos, después de unirse a un receptor (llamado ACE2) en la superficie de la célula. El equipo de Sznitman plantea la hipótesis de que el deterioro del surfactante puede ser particularmente grave en SDRA relacionados con COVID-19.
La Terapia de Reemplazo de Surfactante (TRS) existe y es un procedimiento clínico establecido y que salva vidas en el tratamiento de un tipo similar de SDRA que afecta a niños recién nacidos prematuros, cuyos pulmones inmaduros carecen de surfactante pulmonar. En neonatos, la TRS se basa en la administración endotraqueal de surfactante líquido (es decir, inyectar surfactante externo en los pulmones del neonato). Como resultado de las diferencias en el tamaño pulmonar, este método de administración ha sido altamente ineficaz en adultos. Las instilaciones líquidas se ven fuertemente afectadas por la gravedad y, por lo tanto, drenan rápidamente, ahogando algunas regiones pulmonares y dejando a otras completamente sin tratamiento.
La tecnología pendiente de patente, inventada por el Dr. Yan Ostrovski y el Prof. Sznitman, y conocida como Terapia de Espuma Líquida (LIFT por sus siglas en inglés), está destinada a mejorar notablemente la distribución del surfactante a través de los pulmones. En términos más generales, LIFT es un nuevo método radical para la administración de fármacos pulmonares con el potencial de administrar terapéutica de manera homogénea en los pulmones y, lo que es más importante, en grandes dosis.
Esto se logra al cargar el medicamento en la espuma, o alternativamente espumar el medicamento directamente cuando esto sea posible.
En sus hallazgos (que pronto se presentarán para su publicación científica y sujetos a rigurosas revisiones por expertos), el equipo examinó a fondo en un estudio preclínico in vivo, la seguridad y eficacia del empleo de LIFT con surfactante espumado en un modelo SDRA grave inducido en ratas.
Allí, las ratas recuperaron un estado saludable en 15-30 minutos, sin episodios adversos. Como los pulmones de ratas son demasiado pequeños para demostrar una distribución mejorada que se busca críticamente en los pulmones adultos, el equipo utilizó experimentos ex vivo en pulmones porcinos de tamaño adulto para mostrar cómo la Terapia de Espuma Líquida se propaga homogéneamente en comparación con la administración de líquidos.
Tras estos resultados alentadores, el equipo se encuentra ahora en una carrera para construir un dispositivo de administración completamente funcional y pasar a un estudio preclínico in vivo en casos de SDRA severos en cerdos. Si logran hacerlo exitosamente, los investigadores seguirán con los primeros ensayos clínicos de la terapia, en un esfuerzo por acelerar críticamente el desarrollo de un tratamiento para los pacientes más graves con COVID-19 que padecen del SDRA. La tecnología LIFT será licenciada a la empresa startup Neshima Medical, dirigida por el Dr. Ostrovsky y respaldada por la Unidad de Desarrollo de Negocios T3 del Technion.