WASHINGTON.- EFE- El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, viajará este martes a Arabia Saudí para coordinar la respuesta de su país a los ataques contra refinerías saudíes, que algunas fuentes vinculan a Irán, pese a que todavía se desconocen los resultados de la investigación saudí-estadounidense.
“El secretario de Estado viajará hoy a Arabia Saudí para hablar sobre nuestra respuesta” a los ataques, informó el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, durante un discurso en Washington.
El pasado sábado, dos refinerías de la petrolera estatal saudí Aramco, clave para el abastecimiento mundial de crudo, fueron atacadas con diez drones, causando una reducción de cerca del 50 % de su producción.
La acción fue reivindicada por los rebeldes hutíes del Yemen, apoyados por Irán, pero la coalición de Estados en su contra liderada por Arabia Saudí lo rechazó y, en su primera valoración este lunes, dijo que las armas utilizadas eran iraníes.
Aun así, Riad no ha acusado directamente a Irán de lanzar el ataque y se ha mostrado prudente a la espera de los resultados de la investigación; pese a que Pompeo sí que responsabilizó el sábado a la República Islámica y aseguró que no había “pruebas” de que la agresión proviniera del Yemen.
Durante su intervención, Pence destacó que los servicios de inteligencia estadounidenses siguen “trabajando diligentemente para revisar las pruebas” sobre si Irán estuvo detrás del ataque, y que Trump “determinará en los próximos días las medidas adecuadas” que debe tomar su país.
“Pero Estados Unidos tomará cualquier medida que sea necesaria para defender a nuestro país, nuestras tropas y a nuestros aliados en el Golfo (Pérsico). Pueden contar con ello”, subrayó Pence.
“Estamos cargados y listos, y estamos preparados para defender nuestros intereses y a nuestros aliados en la región -añadió-. Que nadie se confunda”.
El vicepresidente volvía así a emplear la misma frase, “cargados y listos”, que Trump utilizó el domingo y que en inglés hace referencia a las armas de fuego, lo que ha desatado especulaciones sobre una posible respuesta militar de EE.UU.
Hasta ahora, Trump ha evitado señalar definitivamente a Irán y se ha limitado a indicar que “parece que sí” fue el país persa el que estuvo detrás del ataque. Además, este lunes aseguró que su país no quiere una guerra con Teherán, aunque está “preparado” si eso fuera necesario.
A la espera de conocerse los resultados de la investigación, medios de comunicación estadounidenses apuntaban este martes a Teherán, citando fuentes anónimas.
La cadena de televisión CNN, que habló con una fuente “conocedora” de las pesquisas, señaló que los investigadores saudíes y de EE.UU. han establecido “con una muy alta probabilidad” que el ataque fue efectuado desde una base en Irán próxima a la frontera con Irak.
En el bombardeo se emplearon drones y misiles de crucero que volaron a baja altura, reveló la fuente, que agregó que su trayectoria revela que llegaron desde el norte hasta la planta saudí de crudo de Abqaiq, que recibió el impacto de una decena de proyectiles a primera hora del sábado.
Según la CNN, los misiles atravesaron el sur de Irak y pasaron por el espacio aéreo de Kuwait antes de alcanzar sus objetivos en suelo saudí.
El canal CBS, que citó a un alto funcionario estadounidense, afirmó que EE.UU. ha identificado la localización exacta en el sur de Irán desde donde una veintena de drones y misiles de crucero fueron disparados contra instalaciones petroleras saudíes.
La fuente explicó que las baterías antiaéreas saudíes están dirigidas hacia el sur del reino desde hace meses para protegerlo de cualquier ataque de los hutíes en el Yemen, con lo que no pudieron actuar ante un bombardeo desde el norte.
Por su parte, el diario The New York Times fue menos contundente a la hora de apuntar a Irán y dijo, tras consultar con funcionarios estadounidenses, que hasta el momento se desconoce si los ataques fueron llevados a cabo desde territorio iraní o por aliados de Teherán en otros países de la región.
Ese rotativo aseguró que responsables de Inteligencia han descartado que fueran lanzados desde el Yemen y tampoco creen que fuera desde Irak, con lo que la única posibilidad es que hubieran sido efectuados desde un barco en el norte del golfo Pérsico o desde Irán. EFE