CARACAS.- EFE- Muchos venezolanos se han mostrado a favor y en contra de la posición del papa Francisco frente al gobierno de Nicolás Maduro, tras una carta enviada por el pontífice al mandatario, en la que explica que el Vaticano no está en condiciones para una mediación en la crisis.
De acuerdo a medios locales, Eduardo Sanabria y Roberto Weil, connotados dibujantes de ese país, han plasmado las críticas de la población en caricaturas en la que se ve al pontífice indiferente ante la crisis o hablando con Maduro, quien se ve con un garrote en la mano y mostrando una pistola humeante en una mesa.
De su lado, el cardenal de Venezuela, Baltazar Porras, defendió ayer al pontífice luego de la divulgación de una carta que le envió a Nicolás Maduro, en la que manifestó que no había condiciones para una mediación del Vaticano en la crisis de esa nación, de acuerdo a una nota del diario italiano Corriere della Sera. El cardenal señaló en un espacio del medio Unión Radio, que la Iglesia católica no está en contra de ningún sector político, sino que su trabajo buscar una solución de forma pacífica.
“El Vaticano siempre ha estado dispuesto a ayudar y a intermediar a lo largo del tiempo”, afirmó el cardenal, y agregó que no se debe asumir la postura de la Iglesia de no estar con ninguna de las partes como que “nos estamos lavando las manos”.
“La función primordial y más como creyentes y como pastores es buscar la unidad”, puntualizó.
La carta del papa se realiza tras una misiva que le envió el presidente izquierdista, solicitándole su colaboración para un diálogo. El documento del papa se reveló luego de una visita que hizo al Vaticano una delegación de Juan Guaidó.
Varios periodistas y expertos en temas relacionados con el Vaticano han dicho que para el pontífice la crisis en Venezuela es un problema difícil de controlar, a pesar de que trabaje de forma silenciosa para conseguir una solución pacífica.
El Vaticano, desde el 2016, ha intervenido más en la crisis tras participar junto a los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero, de España; Martín Torrijos, de Panamá, y Leonel Fernández, de República Dominicana, y Unasur, en un diálogo entre el gobierno y la oposición que fracasó por la carencia de acuerdo entre las partes.
La posición del papa ha sido criticada dentro de la iglesia. En días pasados, el rector de la Universidad Católica Andrés Bello en Caracas, padre José Virtuoso, manifestó en un programa local que “quisiéramos de parte del papa una postura mucho más contundente, mucho más clara”.
En tanto que la ama de casa Mari Zerpa, quien dice ser una fiel feligresa, dijo que “el papa ha sido demasiado cauteloso ante la grave situación que estamos viviendo todos los venezolanos”.
De su lado, el fraile Edwin Fernández manifestó que el papa Francisco debe ser visto como un “líder político” que se relaciona con todos los gobiernos. EFE