Tras un retroceso temporal, los representantes de Neymar depositaron 222 millones de euros en las arcas de Barcelona para terminar el contrato del brasileño con el club.
Barcelona confirmó la recepción de los fondos en un comunicado, añadiendo que “pasará a la UEFA los detalles de la operación anterior para que puedan determinar las responsabilidades disciplinarias que puedan surgir de este caso”.
Neymar es ahora libre de unirse a París Saint-Germain.
Sus abogados pagaron la suma directamente a Barcelona después de que la Liga se negara a aceptar el dinero en su oficina central en Madrid.
La Liga de Fútbol Profesional, que gobierna las ligas francesas, instó a la Liga a tomar el control y “cumplir con las reglas de la FIFA y sus responsabilidades”.
Marca José Felix Díaz informó de que La Liga no tenía ningún motivo para bloquear la transferencia.
El hecho de que los representantes de Neymar paguen la cláusula de liberación – y no PSG – no es inusual en la Liga. Los futbolistas en España deben comprar a sí mismos, según la BBC Sport.
La forma en que recibió el dinero, sin embargo, es una fuente de discordia.
El presidente de la liga, Javier Tebas, prometió reportar al PSG a la UEFA, alegando que la parte francesa violó las regulaciones del Juego Justo Financiero al recibir apoyo económico del estado de Qatar.
El acuerdo, incluidos los salarios y bonificaciones, supuestamente vale más de 500 millones de euros. Una vez que PSG complete la firma, la cuota empequeñece el desembolso del Manchester United de 105 millones de euros para Paul Pogba.
Neymar espera firmar un contrato de cinco años con el PSG en un informe de 30 millones de euros después de impuestos por temporada, y espera estrenar el sábado contra Amiens, informó el reportero del RMC Sport, Mohamed Bouhfasi, en Twitter.
Independientemente de la ética involucrada, el cambio es un cambio de juego para la Ligue 1, que ha luchado para dominar el respeto internacional a pesar de la fuerza financiera del PSG y el renacimiento juvenil del AS Monaco.
Neymar pasó cuatro años en la capital catalana, donde forjó un potente triunvirato con Lionel Messi y Luis Suárez. Conocida como la temible unidad de MSN, anotaron más de 100 goles en cada una de las últimas tres temporadas.
Había firmado un nuevo contrato el año pasado hasta junio de 2021, pero lo rompió para dirigir una revolución brasileña en el Parc des Princes.
