ESPAÑA. La Policía española detuvo en la ciudad de Alicante (este) al histórico mafioso italiano Fausto Pellegrinetti, huido desde 1993 y sobre quien pesaban tres reclamaciones internacionales por delitos de tráfico de drogas y blanqueo de capitales.
La Dirección General de la Policía informó que Pellegrinetti residía en un ático en una zona de lujo de Alicante bajo una falsa identidad, y su detención, puso fin a una investigación de casi dos años coordinada por la autoridad antimafia italiana.
Pellegrinetti fue detenido en 1992 en Roma con más de USD 1,5 millones en su poder tras una operación de narcotráfico, pero logró huir un año más tarde durante un arresto domiciliario en una clínica romana y continuó con su actividad delictiva en la clandestinidad
Los hechos investigados en su momento acreditaron la compra de 550 kilos de cocaína y el blanqueo de más de USD 6.000 millones procedentes del narcotráfico.
Según fuentes del tribunal, el juez Ismael Moreno informó al mafioso de los cargos que se le imputan y le preguntó si quiere ser extraditado a Italia, a lo que se negó.
Conocido también como Franco o Enrico, el histórico mafioso era miembro de una banda denominada La Magliana, con amplio historial delictivo, y mantuvo una estrecha relación criminal con el famoso clan de los Marselleses.
En 1992, a partir de una investigación de la DEA estadounidense, las autoridades italianas siguieron el rastro del dinero procedente de su última operación de tráfico de estupefacientes desde Norteamérica a Europa y Colombia, y llegaron hasta él.
Fue detenido, pero en octubre de 1993 el mafioso escapó durante un arresto domiciliario en una clínica privada de Roma y continuó presuntamente, junto con otros criminales, con el tráfico de cocaína y el blanqueo de dinero desde la clandestinidad en alguna zona de la provincia de Málaga (sur de España).
A la capital romana llegaban con regularidad grandes cantidades de cocaína, y se estima que, desde su escondite, el mafioso y su grupo habrían traficado unos 500.000 kilos de estupefacientes y habrían blanqueado más de USD 55 millones.
Pellegrinetti era el jefe de la organización, líder indiscutible y director de todas las estrategias, mientras que Primo Ferraresi era su mano derecha, y ambos mantenían fuertes lazos con otros conocidos grupos criminales de la región italiana de Calabria
Según la Policía, los enormes recursos financieros de los que disponía la organización les permitían introducir en el mercado ingentes capitales procedentes del narcotráfico y así influir económicamente en algunos sectores sensibles.
En algunos casos alteraron el precio de mercado de los productos comercializados por la empresa del grupo, como metales y frutas, y se introdujeron en negocios relacionados con los juegos de azar.