Santo Domingo.- Los “musicólogos” o “comunidad musicóloga” como se conoce a miles de dominicanos y dominicanas de todos los gustos, colores y edades que se dedican a “exhibir y poner a sonar” sus costosos equipos de sonido, anunciaron que el sábado, 21 de febrero, desde las nueve de la mañana se congregarán en la Plaza de la Bandera para protestar por los presuntos atropellos a que son sometidos por agentes de la Policía Anti Ruido y otros organismos de seguridad del Estado.
“Parece que traficar, vender y consumir drogas es menos delito que la sana actividad que realizamos, pues lo único que hacemos es poner a sonar nuestros equipos y aparatos, mezclar músicas, divertirnos y hacer que otros se diviertan”, dijo José Bonilla, conocido como “JR”, quien es presidente de la Federación de Asociaciones de la Música de República Dominicana.
José Bonilla (JR), junto a Richard de los Santos, de la Asociación de Musicólogos de la Provincia de San Juan y José García, de la Federación de Musicólogos del Cibao, refirieron que su industria deja más de tres mil millones de pesos anuales al Estado Dominicano en impuestos.
“Pero parece que eso no le importa a la Policía y demás organismos represivos del Estado, pues, aparentemente, nuestra música, nuestros equipos, los artículos que importamos, son buenos para cobrar impuestos, pero para dejarnos realizar nuestra labor no”, comentan.
José Bonilla (JR), Richard de los Santos y José García emitieron sus consideraciones al intercambiar impresiones con Grisel Sánchez, Yulibelis Wanderpool, Juan Pablo Fernández y Vianelo Perdomo, conductores del DesahógateRD, producido en Zol 106.5 de RCC Media.
José Bonilla señala que, aunque en los últimos años esta actividad está teniendo más seguidores, ya hace más de veinte años que en República Dominicana se desarrolla esta afición de alcance internacional, la cual atrae entre sus practicantes y aficionados a empleados públicos y privados, pequeños y medianos empresarios, políticos, peloteros y ciudadanos de todos los estratos sociales.
Al referirse a las grandes inversiones que se hacen para desarrollar estas actividades, Bonilla indica que algunos de sus colegas hacen inversiones para equipos menores llamados «kitipó», pero hay quienes tienen equipos más complejos que invierten hasta más de tres millones de pesos.
«La música es cara, este no es un lujo que lo puede tener todo el mundo», acota José Bonilla (JR), presidente de la Federación de Asociaciones de la Música de República Dominicana.
Los musicólogos realizaban decenas de actividades de manera irregular en espacios públicos, pero también organizaban en eventos en espacios públicos, tanto en el Gran Santo Domingo como en provincias y municipios del país, especialmente en fiestas patronales y festivales.
“Nuestras actividades gustan tanto que atraen a personas de Puerto Rico, Miami, Nueva York y otras latitudes del mundo, además de lograr patrocinios y promociones en páginas web especializadas, grupos de Facebook y redes sociales, lo que ahora se ha estancado por esta situación que nos tiene la llamada Policía Anti Ruido”, expresó.