México-La compra del voto, que se da de manera habitual cada vez que hay comicios en México, “perpetúa la pobreza” y se basa en un reparto de programas sociales que no buscan otorgar derechos a los ciudadanos, sino formar “clientelas”.
La desconfianza en los políticos, el pensamiento de que “hay que sacarles lo que se pueda, porque después se olvidan de uno” y la indiferencia sobre a quién votar porque “son todos iguales” son factores que forman un “caldo de cultivo” aprovechado para este delito, dice en una entrevista con Efe el coordinador de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, Alberto Serdán.
La agrupación, que aúna 60 organizaciones sociales, es una de las impulsoras de Democracia Sin Pobreza, una plataforma que recoge denuncias de compra de voto de cara a las próximas elecciones del 1 de julio, en las que se elige al presidente del país y a quienes ocuparán otros 3.400 cargos federales, estatales y locales.
Desde el 5 de abril y hasta el 30 de mayo, la plataforma ha registrado 244 reportes ciudadanos en 26 estados.