Tel Aviv.- El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, apeló hoy a la cooperación internacional para afrontar las crecientes ciberamenazas globales, procedentes no solo de organizaciones terroristas, sino también de los propios Estados.
Así lo expuso en la mayor conferencia anual de ciberseguridad de Israel, que se celebra entre hoy y mañana en la Universidad de Tel Aviv con miles de asistentes y medio centenar de ponentes de diferentes empresas internacionales y entidades públicas.
Según los participantes, las amenazas son cada vez más sofisticadas y variadas: desde los ataques de denegación de servicios para bloquear ordenadores de forma masiva hasta las campañas en redes sociales para manipular opiniones, o ataques directos a dispositivos móviles y proliferación de ciberarmas de fácil adquisición en internet.
Entre los participantes figuran responsables de multinacionales como Intel, IBM, Microsoft, Check Point, McAfee, expertos de la industria aérea de diversos países, de compañías de automoción como Volkswagen, de departamentos oficiales de energía, consultoras, reguladores.
Vehículos autónomos conectados, sistemas aéreos cada vez más tecnológicos, dispositivos médicos manejados por control remoto, transacciones financieras desde todo tipo de dispositivos, los riesgos de ciberseguridad afectan a todos los sectores y cada vez más, explican las empresas.
En su intervención, el primer ministro israelí alertó de los ciberataques promovidos por ciertos Estados, que “pueden llegar a ser aún peores de lo que ya son hoy en día”, y arruinar negocios, poner en riesgo infraestructuras críticas o afectar directamente a los ciudadanos.
El escenario podría incluso complicarse, dada la facilidad con la que se pueden programar ataques de consecuencias masivas y de los que cualquier persona en el mundo podría ser víctima, según el primer ministro israelí.
En la actual era digital, los ciberataques son una gran amenaza para las infraestructuras críticas de los países (finanzas, energía, telecomunicaciones), y también para la sociedad en su conjunto, ya que pueden afectar a los medios de transporte -coches y aviones conectados- o incluso a la salud, a través de dispositivos médicos.
“El mundo está inmerso en una profunda transformación, una revolución histórica”, con una escalada de compañías tecnológicas en los primeros puestos de rentabilidad como consecuencia de la confluencia de tecnologías como los “macrodatos” o el Big Data, la inteligencia artificial y la creciente conectividad, explica Netanyahu.
Garantizar la seguridad a la vez que se respeta la privacidad personal, consolidar los avances en inteligencia artificial, la computación en “la nube”, los dispositivos con control remoto para su activación o la implementación de tecnologías como la cadena de bloques o “blockchain” implican grandes retos pero también desafíos, según los expertos.
Los ciudadanos deben estar protegidos para todo esto, afirmó por su parte Yigal Unna, jefe de la Dirección nacional de ciberseguridad en Israel, una entidad dirigida a coordinar las acciones de los distintos departamentos del Gobierno en este ámbito, tras apelar a la cooperación internacional ya que, lamentablemente “lo peor está por venir”.
Desde la Universidad de Tel Aviv, su presidente, Joseph Klafter, advirtió de los riesgos crecientes de la seguridad en internet con la conectividad global, y animó a la cooperación internacional en ámbitos como la investigación académica para garantizar la seguridad de los países compartiendo información.
Por su parte, la emprendedora Orna Berry, premiada esta año por sus contribuciones a la ciberindustria de Israel, destacó el mérito innovador y tecnológico de un país como éste con unas condiciones orográficas y climatológicas complicadas en medio del desierto, y una tensión política continua con los territorios vecinos.EFE