El Hispasat, lanzado al espacio con un cohete Falcon 9 de Space X, se colocó minutos después en una órbita geoestacionaria donde realizará durante algunas semanas las pruebas para comprobar su correcto funcionamiento.
Posteriormente, se ubicará en su posición orbital definitiva, 30° Oeste, donde sustituirá y ampliará la capacidad del Hispasat 30W-4, en órbita desde septiembre de 2002.
El lanzamiento estaba inicialmente previsto para la semana pasada, pero se aplazó al detectarse una incidencia que ya fue resuelta en el sistema de presurización de la cofia.
Este satélite fue fabricado por Space Systems Loral en Palo Alto (California, EE.UU.) y, según Hispasat, «ofrece mejores coberturas y servicios que aumentan la oferta del operador en bandas C y Ku, así como nuevas soluciones de conectividad en banda Ka».
Mejoras «que permitirán el acceso a Internet de banda ancha en zonas rurales» y «contribuirá a la reducción de la brecha digital en América Latina, España y el norte de África».
Asimismo, «reforzará la distribución de contenidos audiovisuales en América Latina y aportará conectividad en servicios ferroviarios de alta velocidad o marítimos en el Caribe y el Mediterráneo».
