Santo Domingo- Con el propósito de reducir la contaminación de los ríos Ozama e Isabela la planta de aguas residuales que se está construyendo entrará en operación en el primer semestre del 2019.
La nueva estación depurará unos 27 millones de galones de agua contaminada y los devolverá completamente limpios al caudal.
La planta contribuirá al saneamiento de las aguas residuales, residenciales e industriales, además de que favorecerá a unas 450 mil personas en más de 30 sectores del Distrito Nacional y el municipio de Santo Domingo Norte.
Asimismo tendrá un impacto significativo en la salud de las personas que habitan en zonas vulnerables que circundan por ambos ríos y será un paso de avance en la protección del medio ambiente.
El saneamiento de esas aguas incrementará los niveles de salubridad locales disminuyendo enfermedades y mejorará los indicadores socioeconómicos y ambientales del gran Santo Domingo.
Con la construcción de esa obra se han generado 2 mil 600 nuevos empleos directos e indirectos.
Se recuerda que la reducción de la contaminación de la cuenca de los ríos Ozama e Isabela es una meta presidencial y la puesta en marcha de esa planta es uno de los objetivos principales de la Comisión Ozama – Isabela