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La opositora venezolana María Corina Machado, cuyo movimiento político se ha separado de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), se mantiene firme, en una entrevista con Efe, en que lo único que se puede negociar con el Gobierno es la salida del presidente Nicolás Maduro.

Machado insiste además en que no ha sido su organización, Vente Venezuela, la que se ha apartado de la alianza opositora, sino otros partidos, en respuesta a su papel en la ruptura, motivada por la decisión de la MUD de presentarse a las elecciones regionales de octubre.

Vente Venezuela «no se sale de la Unidad», afirmó, al insistir en que hay organizaciones políticas que están «cometiendo un error y son las que -a su juicio- han salido de la MUD» y del mandato del 16 de julio», en alusión a la elección de la Asamblea Constituyente, que se instauró por mayoría, pero aún así siete millones de venezolanos la rechazaron.

La exdiputada a la Asamblea Nacional (Parlamento) se defendió así de las acusaciones de «división».

«Esa ruta no lleva a ninguna parte, no nos va a dar poder político adicional, pero sí nos va a quitar lo más importante que son esos espacios que hemos conquistado con tanto sacrificio, que son los espacios de la conexión y la credibilidad con la gente», apuntó Machado al censurar a quienes le critican por su decisión.

En cuanto a su posición frente al Gobierno, indicó que sí puede haber un escenario de negociación pero «totalmente transparente y con un sólo propósito», el del cambio de Gobierno.

«No es, bueno dale unos beneficios a un sector del país a cambio de que tú (Maduro) te quedes, eso no existe», dijo refiriéndose en primera persona al mandatario.

A su juicio, Venezuela no está enfrentando «una dictadura más», sino «un régimen de mafias que ha sido infiltrado y que tiene conexiones con el narcotráfico, con el contrabando hasta con el terrorismo».

Para Machado ir a las elecciones de octubre es darle tiempo al Gobierno y eso significa «la destrucción total de Venezuela y en este momento no lo podemos permitir. Darle tiempo a este régimen es arriesgar todo lo que hemos logrado hasta ahora», matizó.

La dirigente insistió que lo que se debe hacer es mantener unido al pueblo de Venezuela, «cumplir el mandato del 16 de julio, que la Asamblea Nacional nombre los nuevos rectores del CNE (Consejo Nacional Electoral), que además tienen su periodo vencido, y entonces que este nuevo CNE legítimo convoque a las elecciones».

Machado cree que la poca respuesta a las recientes convocatorias a protestas contra el Gobierno de Maduro tiene que ver con la decisión de la MUD de participar en los comicios, y por ello la sociedad está enviando «una señal».

«Aquí no está nadie cansado y el miedo no nos ha vencido, lo que hay es una señal a la consciencia de cada uno de los dirigentes de que no defraudemos el inmenso sacrificio que está haciendo la sociedad venezolana», aseveró.

Uno de los errores de la oposición -agregó- ha sido «subestimar la fuerza de la gente» y la «naturaleza criminal» del Gobierno.

Machado, inhabilitada en 2015 para ejercer cualquier cargo público por un año y tachada de radical por distintos sectores, cree que los opositores están a «la expectativa» y decididos a regresar, «pero con un propósito claro: la salida de Maduro y de la dictadura del poder».

«Lograr toda esa energía que se requiere para que Maduro tenga que aceptar que esa es su mejor opción» y diciéndole a Maduro: «señor le vamos a dar estas garantías, estas son las seguridades, estos son los términos de la justicia pero usted se tiene que ir».

Si bien cree que la mayoría defiende esa idea, «hay un sector que se confundió», destacó, para concluir: «Yo creo que estamos a tiempo de seguir unidos».

Bárbara Agelvis