WASHINGTON.- EFE- Larry Kudlow, asesor económico principal del presidente de EE.UU., Donald Trump, y Peter Navarro, principal asesor comercial de la Casa Blanca, defendieron este domingo la fortaleza de la economía estadounidense y descartaron que los aranceles impuestos a China golpeen a los consumidores del país.
“No veo una recesión en absoluto”, declaró Kudlow durante una entrevista con la cadena Fox News, después de que Wall Street reaccionara la semana pasada con bajas ante las que han sido consideradas señales de una posible recesión.
El pasado miércoles, la rentabilidad de la deuda a 10 años -de referencia para los préstamos hipotecarios- quedó brevemente por debajo de la de 2 años (1,623 % frente a 1,634 %) describiendo gráficamente una “curva invertida” que ha precedido a varias recesiones y que no se producía desde 2005, lo que provocó un desplome en el parqué.
Pero Kudlow salió al paso de los temores. “No hay recesión en el horizonte”, apuntó el asesor, quien consideró que el programa pro-crecimiento de Trump “ha tenido éxito” y anticipó que “nos quedaremos con eso”.
“¿Qué tiene de malo un poco de optimismo?”, se preguntó en otro aparte de la entrevista, en la que destacó las cifras de empleo y el nivel de ingreso de los trabajadores en el país.
Kudlow ratificó sus declaraciones en otra entrevista con NBC News, en la que sentenció que, a su juicio, a Estados Unidos le está “yendo bastante bien”.
Por su parte, Navarro defendió en declaraciones a la cadena ABC el desempeño de la economía estadounidense, que Trump exhibe como uno de los principales logros de su Administración.
“Lo que puedo decir con certeza es que tendremos una economía fuerte hasta 2020 y más allá”, sentenció Navarro, quien recordó que antes de llegar a la Casa Blanca estuvo en la mayor parte de los últimos 20 años pronosticando “el ciclo económico y las tendencias del mercado de valores”.
Navarro se refirió igualmente en declaraciones a CNN a los aranceles impuestos a China tras la decisión de EE.UU. de aplazar hasta el 15 de diciembre la entrada en vigor de una nueva tanda de gravámenes del 10 % sobre importaciones chinas valoradas en 300.000 millones de dólares.
Analistas han interpretado la medida como un reconocimiento por parte del Gobierno Trump de que los aranceles están golpeando a los consumidores estadounidenses.
Sin embargo, Navarro sentenció que los aranceles “no están perjudicando a nadie aquí”.
“Estamos en una situación en la que los consumidores no han resultado perjudicados, China está asumiendo toda la carga”, apuntó Navarro, quien señaló: “Estamos ganando”. EFE